La fitoterapia es una parte de la medicina natural. Es el empleo de plantas o de medicamentos a base de plantas (polvos, tinturas, cocimientos, infusiones, etc.) para sanar naturalmente los diferentes males del organismo.
La fitoterapia es probablemente la mejor forma de prevenir ciertas enfermedades, ya que las plantas pueden suplementar de forma natural al organismo las sustancias necesarias para mantener su equilibrio vital.
A través de los siglos los hombres de diferentes continentes han adquirido el conocimiento de las plantas y sus propiedades terapéuticas. Al día de hoy la eficacia de la medicina natural a través de las plantas está demostrada y reconocida científicamente y hay beneficios que son irreprochables.
La eficacia de la fitoterapia se basa en la elección correcta de plantas y sus componentes. La calidad de las plantas es esencial, y esta se obtiene por la selección de la especie, el principio activo de la planta (raíz, flor, fruto, hojas, etc.), las buenas condiciones de cultivo y su buena recolección
La fitoterapia estimula nuestro organismo sin intoxicarlo sin grandes efectos secundarios permitiendo una verdadera prevención.
Las enfermedades cotidianas más comunes como stress, sobrepeso, insomnio, alergias, etc, son la base para la aparición de enfermedades más complejas como diabetes, síndrome metabólico, depresión, infecciones; la buena alimentación y la fitoterapia son la herramienta más eficaz, inocua y económica para prevenir enfermedades.
Los medicamentos químicos están compuestos generalmente de un solo principio activo; por ejemplo tomar una aspirina es absorber moléculas de ácido acetilsalicílico y nada más. En las plantas hay un gran número de principios activos diferentes que actuaran sobre diferentes partes del organismo (acción sinérgica); este hecho ha sido verificado ya científicamente y mundialmente reconocido. Esta sinergia puede ser aún más mejorada mezclando diferentes plantas
Es muy importante indicar que existe un lugar para la medicina tradicional o alópata y un lugar para la medicina natural y ambas se pueden complementar.
Muchos de los medicamentos de uso habitual vienen de las plantas; por ejemplo la aspirina (ácido acetilsalicílico) viene de la corteza del sauce blanco, la quinina un antimalario viene de la corteza de la quina. El taxus y la vincristina que son drogas usadas en el cáncer vienen del Tejo del Pacífico y de la vincapervinca, el nifedipino de la Amni Visnaga, etc.
